¿A
QUÉ SABE LA LUNA? (Michael Grejnek), de la editorial Kalandraka, una de
mis favoritas junto con las de Combel y Kókinos, y alguna otra.
Éste no es interactivo ni está descatalogado, al contrario, estará por la edición nº mogollónmil tropecientos. Pero no tiene nada que envidiar a los otros. Es, también, acumulativo, y me encanta. Por su sencillez en primer lugar; una historia muy sencilla y unas ilustraciones igualmente poco cargadas, pero preciosas. El juego que da, sin embargo, es asombroso. Sólo tenéis que teclear el título en google images y veréis la cantidad de atractivas actividades que se han desarrollado en torno a él.
Es también uno de mis favoritos, como todos los que, además de ser inmensamente disfrutables por sí mismos, te abren la imaginación a infinitos "¿y si...?". Mis partes favoritas: la utilidad de todos para llegar y, tras el suspense de la historia en busca del sabor selenita: la solución múltiple. Vamos, una maravilla de libro. Seguro que terminarán reeditándolo con otros formatos para encarecerlo, cargándoselo, como sucede en no pocas ocasiones. A mí me fascina tal y como está en el primer formato: sencillo en apariencia y precioso.
Éste no es interactivo ni está descatalogado, al contrario, estará por la edición nº mogollónmil tropecientos. Pero no tiene nada que envidiar a los otros. Es, también, acumulativo, y me encanta. Por su sencillez en primer lugar; una historia muy sencilla y unas ilustraciones igualmente poco cargadas, pero preciosas. El juego que da, sin embargo, es asombroso. Sólo tenéis que teclear el título en google images y veréis la cantidad de atractivas actividades que se han desarrollado en torno a él.
Es también uno de mis favoritos, como todos los que, además de ser inmensamente disfrutables por sí mismos, te abren la imaginación a infinitos "¿y si...?". Mis partes favoritas: la utilidad de todos para llegar y, tras el suspense de la historia en busca del sabor selenita: la solución múltiple. Vamos, una maravilla de libro. Seguro que terminarán reeditándolo con otros formatos para encarecerlo, cargándoselo, como sucede en no pocas ocasiones. A mí me fascina tal y como está en el primer formato: sencillo en apariencia y precioso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario