De
la editorial Combel, es, como su propio título indica, un amor de
libro. Estéticamente es una gozadita. Parece un libro de los de tipo
álbum, pero pasadas la portada y contraportada se convierte en dos historias en sendos minilibros que se abren, respectivamente, hacia la izquierda (Enriqueta) o hacia la derecha (Gabriel).
El punto de lectura, como no podía ser de otro modo, es un botón. Está escrito en sencillos versos que traman una divertida historia sin pretensiones:
La señorita Enriqueta
es una joven muy coqueta. (...)
El señor Gabriel
va siempre como un pincel. (...)
Los dos son unos enamorados de los abrigos y a los dos se les pierde un botón de su abrigo favorito.
Lo buscan por todas partes y... claro, dos personas con tanto tanto tanto en común ¡hasta el azar! tienen que terminar por encontrarse.
El formato y las ilustraciones muy bonitos y originales, con una profundidad que a cada momento las tocas para ver si realmente es papel o si se trata de un libro de texturas. Una gozadita.
El punto de lectura, como no podía ser de otro modo, es un botón. Está escrito en sencillos versos que traman una divertida historia sin pretensiones:
La señorita Enriqueta
es una joven muy coqueta. (...)
El señor Gabriel
va siempre como un pincel. (...)
Los dos son unos enamorados de los abrigos y a los dos se les pierde un botón de su abrigo favorito.
Lo buscan por todas partes y... claro, dos personas con tanto tanto tanto en común ¡hasta el azar! tienen que terminar por encontrarse.
El formato y las ilustraciones muy bonitos y originales, con una profundidad que a cada momento las tocas para ver si realmente es papel o si se trata de un libro de texturas. Una gozadita.
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